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Discurso del Premio Juan Valera 2022
02.07.22 - Escrito por: Bryan Perilla
Muy buenas tardes a todos los presentes. Me complace estar en la muy ilustre y leal ciudad de Cabra. Quiero iniciar esta breve intervención agradeciendo, por una parte, al jurado por haber considerado mi trabajo como ganador del certamen, me hace sentir realmente muy halagado; por otra parte, a todos los miembros del equipo logístico que gestionaron mi viaje desde Barcelona para ser parte de esta celebración, gracias al orden y diligencia con que procedieron, mi llegada a Cabra se llevó a cabo sin ningún problema.
Saludo especialmente al señor alcalde Fernando Priego y a su equipo de trabajo, como también al maestro Rafael Luna García, cuyo trabajo en materia poética y religiosa es admirable.
Como ya se ha dicho al inicio de esta ceremonia, mi nombre es Bryan Perilla, soy de Cali, Colombia, una ciudad atravesada por siete ríos y más conocida, por el verso de una canción, como "la sucursal del cielo". Estudié Filosofía y me gradué con una monografía sobre los límites de la lógica matemática y el alcance de la lingüística para acercarse a ciertos problemas de la Filosofía, de ahí que un buen grueso de Metafísica, pero no a la ligera, ensayo por el que recibo esta condecoración, gire en torno a temas relacionadas con el campo de la lógica y del análisis formal del lenguaje; pero de ahí también que, en cierto grado, el premio me haya tomado por sorpresa, ya que, hasta donde mi investigación me permitió constatar, los trabajos dedicados a la figura de don Juan Valera tienden a centrarse, por un lado, en la vida del autor y, por otro, en su producción literaria, tanto a nivel narrativo como en el plano de la crítica literaria. Mi ensayo, sin embargo, no viene motivado en sentido estricto por ninguno de estos aspectos, sino por el análisis filosófico de una de sus obras, titulada por nuestro autor como Metafísica a la ligera; es, por lo tanto, un trabajo filosófico o, por lo menos, eso procura ser.
Me pasó, pues, algo parecido a lo que le sucedió a Bob Dylan, que siendo cantautor resultó haciéndose, para sorpresa suya, con un Nobel de literatura ? evidentemente, no quiero decir con ello que me ponga yo en la misma categoría de él: Dylan está en otro nivel, ya es inmortal. Reconozco, de este modo, que al rendir mi trabajo al análisis del jurado, lo hice, por una parte, con cierta cuota de escepticismo, pues, además de la duda que queda sobre la recepción de un trabajo presentado a un certamen, no se trataba, como ya lo expresé, de un trabajo que siguiera en contenido la línea de las sendas investigaciones acerca de nuestro escritor y su obra; pero también con cierta sospecha de que una exploración no tan tradicional sobre la obra de Valera tal vez pudiese despertar algún interés. Al cabo de estos últimos cuatro meses, la duda ha quedado disipada y la sospecha, confirmada.
Naturalmente, cabe preguntarse porqué realizar un trabajo filosófico sobre la obra de alguien que, sobre todo, cultivó la narrativa y la crítica literaria. La razón es muy sencilla: don Juan, como bien se sabe, había estudiado filosofía y, además, algo poco mencionado según mi impresión, había escrito filosofía y sobre filosofía. Ejemplo de ello son trabajos como El Racionalismo armónico, La enseñanza de la Filosofía en las Universidades, De la filosofía española y Metafísica a la ligera, obra a la que dediqué mi ensayo. De modo, pues, que mi trabajo pretende constituir una tentativa de diálogo no tanto con Juan Valera el literato, sino Juan Valera el filósofo.
Por lo demás, no creo necesario referirme al detalle sobre Metafísica a la ligera, ello anularía la justificación misma del ensayo, sería como hacer una película y, en lugar de invitar al público a verla, resuelva solo hablar de ella; pero puedo compartir, de manera general, algunos rasgos sobre la obra a partir del enfoque que adopté para su estudio: Metafísica a la ligera es un trabajo filosófico en formato epistolar - algo inusual en la producción filosófica del tiempo de nuestro autor - que Valera inició motivado por su lectura de El Ideísmo, obra filosófica escrita por Ramon de Campoamor. La importancia que Valera atribuyó a su Metafísica a la ligera fue tal que, refiriéndose a ella en una carta remitida a Menéndez Pelayo, dijo "Será mi libro de Dios, mi credo, mi fe, mi amor místico de lo absoluto y eterno". De hecho, el mismo Menéndez Pelayo, en una carta enviada a Valera, señaló que la obra constituía uno de los más notables y originales esfuerzos del pensamiento español del siglo XIX.
El desarrollo de la obra fue muy accidentado, debido a motivos relacionados con la vida profesional y personal del autor; pero también, como el mismo Valera lo deja ver en su correspondencia con Menéndez Pelayo, por la densidad y complejidad de los temas que en ella abordó. La obra, lamentablemente, quedó inconclusa, sin que ello la privase de ser un campo fértil de estudio. El trabajo comprende, por lo demás, temas vinculados a la pregunta sobre el verdadero sentido de la metafísica, a ciertos problemas epistemológicos (siendo quizás el más destacable entre ellos el del cogito cartesiano) y al significado de la omnipotencia de Dios.
Para el estudio de la obra destiné tres capítulos en mi ensayo: en el primero reconstruyo, por una parte, el origen y desarrollo de la Metafísica a la ligera de nuestro autor, basándome principalmente en la correspondencia entablada entre Valera y Menéndez Pelayo; por otra parte, expongo los rasgos distintivos del formato y estructura de la obra, resaltando su carácter epistolar y su estilo. En el segundo capítulo, realizo una exposición en perspectiva histórica sobre los vestigios de la idea de metafísica que Valera acoge en su obra con la intención de identificar las raíces de la filosofía abrazada por él y, así, comprender la proyección que Valera le adjudicaba al ejercicio de la filosofía, es decir, a su función o razón de ser.
Finalmente, en el tercer capítulo, analizo la consistencia de cierto método filosófico que Valera adopta y expone a lo largo de su obra: el psicologismo. Comienzo, entonces, exponiendo las principales tesis epistemológicas que Valera formula desde este enfoque y, posteriormente, evalúo la consistencia de algunos de los argumentos que, con base en su psicologismo, nuestro autor aduce frente a varios de los temas o problemas capitales del pensamiento filosófico de su tiempo.
Este es, pues, un bosquejo de mi ensayo, con el que pretendo contribuir en el fomento y desarrollo de las investigaciones en torno la vida y obra del maestro Juan Valera.
Una vez más, agradezco al jurado por haber considerado mi trabajo merecedor de este premio.
Gracias a todos ustedes por su atención.
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