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Los Remedios ¿y las ayudas?
09.01.2007 - Escrito por: José M. Jiménez Migueles
El pasado sábado pudimos observar una de las anécdotas más curiosas de la recién concluida Navidad: un roscón de Reyes de más de 250 metros de longitud. La iniciativa fue obra de la Comisión restauradora de la Iglesia de los Remedios que, desde que uno de los techos decidiera venirse abajo, ha actuado, con sigilo pero con firmeza, para conseguir recaudar los fondos necesarios para la restauración de la misma.
Por un lado, resulta loable que toda la recaudación que esta Comisión ha obtenido haya sido a partir de donativos particulares y anónimos y fruto del trabajo entusiasta de muchas personas que se han volcado en las diferentes actividades que se han llevado a cabo. Mas resulta lamentable que aún no se sepa nada de los diferentes fondos que tenían que haber dado las instituciones públicas competentes a tal efecto.Me consta que, seguramente, dentro de unos meses, ciertos personajes vendrán a anunciarnos que sí, que su institución colabora con estas obras, que dan dinero, vamos. Y es que, queridos lectores, estamos en época de elecciones, por lo que los fondos se darán en el momento justo para que tengan la mayor repercusión electoral posible. Sí. Sacar votos del dinero de todos. Algunas veces parece que los políticos olvidan que el dinero que conceden, mediante ayudas, subvenciones o demás fórmulas financieras, es un “favor” que nos hacen mientras que realmente ese dinero es nuestro y ese “favor” no es sino el correcto ejercicio de sus funciones.
Me alegro de que la obra vaya para adelante. Alegra ver el anuncio que este periódico digital hizo acerca de la reapertura del templo, pensado para las últimas semanas de febrero. Alegra ver como el trabajo callado tiene sus frutos. Y alegrará aún más cuando veamos llegar las tan manidas ayudas económicas, tan necesarias para luego ponerse en la foto. Mientras tanto, el pueblo segurá dando una lección de cómo hacer las cosas a más de un@.
P. D. Ya va siendo hora de que a este templo se le conozca, de forma oficial, de la misma manera en que se le conoce de forma popular, como la Iglesia de la Soledad. ¿Habrá movimientos para ello? Estaremos atentos.
P.D. 2. Desde La Opinión de Cabra, brindamos nuestro espacio virtual e impreso para todos aquellas personas que quieran lanzar cualquier tipo de información sobre la restauración de este templo, a la vez que apoyamos sin nigun tipo de fisura la valiente labor realizada por la Comisión Restauradora, encabezada por el nuevo párroco de esta felgresía, Don Gregorio Molina Hidalgo.
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