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El recinto ferial de Pozoblanco ha sido el lugar donde se han desarrollado las sesiones, que comenzaban en la tarde del 20 de noviembre con la dedicada a nuestro insigne polígrafo, don Juan Valera, en el bicentenario de su nacimiento.
En el acto inaugural, al que asistieron diversas autoridades y personalidades, contó con la presencia del presidente de la Fundación y director de la Real Academia Española, Santiago Muñoz Machado; del alcalde de Pozoblanco, Santiago Cabello Muñoz, y del presidente de COVAP, Ricardo Delgado Vizcaíno. Durante su intervención, Ricardo Delgado Vizcaíno resaltó la importancia de todas las actividades que viene desarrollando la Fundación ya que "si el modelo cooperativista de COVAP tiene su objetivo en las personas de un territorio para frenar la despoblación, la Fundación es una herramienta para contribuir al desarrollo cultural de esta zona". Por su parte, Muñoz Machado ha desgranado un programa que vuelve a asentarse en dos claves: aniversarios o efemérides y acontecimientos o hechos de actualidad que "deben ser reseñados y analizados". Finalmente, el primer edil pozoalbense ha agradecido "la sensibilidad por nuestro territorio" que demuestra la Fundación Ricardo Delgado Vizcaíno.
Desgranar la figura del escritor egabrense Juan Valera, fue el objetivo de la primera sesión de las Jornadas de Otoño, interviniendo en primer lugar Rafael Jiménez Asensio, catedrático de Derecho Público y consultor institucional, abordando la ponencia "El liberalismo templado de Juan Valera en la España de los turrones". Ha sido una primera aproximación que ha dejado a un lado su faceta como escritor centrándose en su actividad política y diplomática como una puerta de "ascenso social" que provocó que en ocasiones las letras llegaran a ser una "actividad subsidiaria".
El catedrático, autor de un reciente ensayo sobre Valera (Liberalismo político en la España de los turrones), ha recalcado que Juan Valera fue "un liberal de verso suelto" porque sus tesis se acercaron a los progresistas, pero en otra época tuvo "marcados tintes conservadores", sin dejar de exponer que "fue, sobre todo, un liberal centrado que huía de los extremos" porque "los extremos acaban desgarrando a quien pretende convivir con ellos". Una figura que encontró "dificultades" para encajar en la política porque "su estatura intelectual estuvo muy por encima de unos políticos mediocres" y ahí es donde encontró "un refugio seguro en las letras". Después de analizar esa apuesta por la política, Jiménez Asensio ha resaltado que fue en el "invierno existencial" de Valera, con el escritor regresando a España y sobrepasando los 70 años, cuando aparece una de las etapas "más productivas desde el punto de vista literario".
Tras esa disección de la parte política del escritor egabrense, Santiago Muñoz Machado centró su conferencia en otro terreno de este "referente de la cultura española" de su época, el de su aportación a la Real Academia Española. Para ello hizo referencia a los discursos de Juan Valera contestando a los ingresos de nuevos académicos de número a los que ha catalogado de "piezas literarias valiosísimas que permiten conocer todos sus registros". Antes de esas contestaciones, Muñoz Machado ha explicado que en su acto de ingreso, Valera optó por "un discurso de una modernidad extraordinaria" ya que planteó en qué medida la RAE puede dejarse llevar por los neologismos, en aquellos momentos los galicismos, en la actualidad los anglicismos. Una postura a la que Valera "se opone de manera tajante", así como a la aceptación "sin más de un vocabulario vulgar" por lo que postula por "un estilo nacional a la hora de hablar".
De "excepcional" ha catalogado el actual director de la RAE ese discurso, así como algunas de las réplicas dadas por Valera a los discursos de ingreso de figuras como Antonio Cánovas del Castillo, Francisco de Paula Canalejas, Núñez de Arce, el Conde de Casa Valencia o Marcelino Menéndez Pelayo. Muñoz Machado ha resaltado otros discursos de Valera como el que realizó en su ingreso en la Academia de las Ciencias Morales y Política sobre las teorías filosóficas y políticas de Antonio Cánovas del Castillo. Por último, ha resaltado algunos de los encargos de la RAE a Valera con su participación en la explicación de El Quijote como "el más digno de señalar".
Trazado el perfil político y académico de Juan Valera cerraba la jornada con el Juan Valera literato de la mano de nuestro director Antonio Ramón Jiménez Montes y su ponencia "Observación y fantasía: el Arte por el Arte en la obra de Valera". Así, Jiménez Montes señalaba que la obra del escritor natural de Cabra está impregnada de "un clasicismo a su manera, un realismo estético que es el hilo conductor de toda su producción literaria". "Don Juan Valera es el Don Juan cordobés, punta del liberalismo y afán creador, busca el arte por el arte, lo bello por encima de cualquier otra motivación", ha defendido. Ese universal humano de la belleza está presente en la obra de un escritor que "no inventó, no innovó, pero sí expresó su pensamiento" lo que le hizo ser reconocido por autores contemporáneos como Menéndez Pelayo.
Jiménez Montes, premio Juan Valera 2024 junto a José Manuel Jiménez Migueles, ha dado claves también de la importancia que tiene en la literatura del egabrense su entorno más cercano y lejano y ahí aparece una "huida del centralismo" y un capítulo de "costumbrismo literario" donde Cabra y Doña Mencía cobran especial relevancia, que recrea e inmortaliza en sus novelas revestido de un lenguaje que deja clara la "devoción" que siente por la tierra que lo vio nacer. Todo ello en una producción que busca "el arte por el arte" donde su valer "estriba en el lenguaje y estilo y no en las aventuras ni enredos, Valera no es un pintor que inventa, sino que sabe pintar muy bien".
Terminaba su disertación con algunas frases del propio don Juan Valera, que extrajo de alguno de los discursos del polígrafo en el Ateneo de Madrid o en la propia Real Academia Española.
LOS MACHADO Y LA DESINFORMACIÓN
Las Jornadas de Otoño abordaron también una sesión dedicada la figura de Los Machado Los Machado con Antonio y Manuel en el centro, pero con las huellas familiares que impregnan su obra. Seguir esas influencias para luego adentrarse en la obra de ambos poetas fue el camino propuesto de una tarde que tuvo un final especial e íntimo, a pesar del lleno del auditorio, con la lectura de poemas que realizó la actriz Irene Escolar. La intérprete puso voz a algunas de las palabras escritas por los hermanos Machado y que se entendieron mejor después de las aportaciones realizadas por los expertos que intervinieron durante la sesión.
La primera de ellas fue la periodista y escritora Eva Díaz Pérez, encargada de trazar la historia de "una estirpe intelectual" que dejó huellas en la obra de Antonio y Manuel. Una historia convertida en influencias en la obra de los poetas, como la dejada por el abuelo paterno y su observación de la naturaleza; o la de la abuela paterna, la "contadora de cuentos", que aporta la "veta popular" a ambos escritores. Todo ello, sin olvidar al progenitor que los impregna del "mundo popular, la oralidad y las costumbres" lo que deja aires romanceados en la obra de ambos poetas.
Tras el trazo de esa línea de influencia, de esas huellas familiares, los poetas y su forma de hacer y entender la literatura cobraron protagonismo. Así, Rafael Alarcón Sierra, catedrático de Literatura Española, se acercó a la obra de Manuel Machado sin desvincularla de la de Antonio Machado y la de Juan Ramón Jiménez por ser los tres introductores del "simbolismo". "Toda la poesía española, hasta Bécquer y Rosalía de Castro, era realista, se entendía mediante la razón. Hay un salto impresionante con los Machado y Juan Ramón Jiménez porque introducen una poesía emocional, irracional, que llega derivada de la crisis de fin de siglo", expuso el catedrático. Para visualizar esta cuestión, derivada de su contacto con artistas franceses, Alarcón leyó varios poemas de Manuel Machado extraídos de su obra "Alma".
El paseo por la vida de los Machado finalizó con el menor de los hermanos, Antonio Machado, del que habló Alfonso Guerra, comisario de la exposición "Los Machado. Retrato de Familia", que se encuentra en la actualidad expuesta en Sevilla. Entregado a la obra de Antonio Machado, el que fuera vicepresidente del Gobierno resaltó su "identificación" con un poeta cuya "compleja obra me fue otorgando una peculiar escuela de aprendizaje".
El viernes 22 concluían las jornadas en Pozoblanco con tema de máxima actualidad como es la desinformación, las nuevas tendencias en la comunicación y la relación que guardan con la política y con la sociedad actual. Grijelmo abordó la utilización del anonimato, después de hacer un recorrido histórico de sus formas y usos, en las redes sociales como herramienta de ataques apostando por una «regulación del anonimato en la red» que pasa por una legislación clara al respecto. La convivencia de los medios de comunicación con las redes sociales y la aparición de bulos fue abordada por Julián Quirós, mientras que Cebrián cerró la tarde exponiendo la complejidad de la regulación, pero también el alto índice de uso de las redes lo que las convierten en «medios de comunicación, aunque sean otro tipo de medios». La posverdad, como verdad emocional, y la huida del análisis intelectual de la realidad fueron otras de las cuestiones abordadas por Cebrián, al igual que las fake news (que el director de la RAE señaló prefiere llamar falsedades o noticias falsas y la polarización a la que conducen por cómo están concebidos los algoritmos de algunas de esas redes sociales.
Todo el programa se desarrolló en el auditorio del recinto ferial de Pozoblanco, que completó su aforo los tres días, además de retransmitirse en directo, en el enlace que os dejamos más abajo.
Desde La Opinión de Cabra, felicitamos al equipo de la fundación por esta nueva edición de la Jornadas de Otoño de Pozoblanco, que ha contado con un magnífico plantel en el programa, y cuya organización ha sido ejemplar en todos los aspectos de su desarrollo. La Fundación Ricardo Delgado Vizcaíno, auspiciada por la Cooperativa del Valle de los Pedroches, COVAP, prepara ya una nueva edición tras este cuarto de siglo de las Jornadas de Otoño en Pozoblanco. Enhorabuena a toda la organización.
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