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ANTOLOGÍA DE LA ZARZUELA. CENTRO FILARMÓNICO EGABRENSE.
15.12.08 MÚSICA CLÁSICA - Escrito por: Rafael Nieto López
Noche de gran gala ayer 13 de diciembre en el Teatro Municipal “El Jardinito” donde se representó, con lleno total, la Antología de la Zarzuela que ha preparado el Centro Filarmónico Egabrense con su Coro y Solistas, tras un arduo trabajo del cordobés José Antonio Varo Mora (director de la Banda de Música y Coral de Baena), con las huestes egabrenses a las que ha dirigido musical y escénicamente en esta Antología, de “antología” en la historia del Filarmónico de Cabra, mereciendo todos un sobresaliente.
En un espectáculo de esta índole montado con los recursos de un pueblo, han intervenido muchas personas con diversos cometidos, siendo de justicia señalarlos, por lo que comienzo diciendo que el atrezzo, utillería, vestuario (qué bien realizado, vistoso y variado según las obras), maquillaje y peluquería han estado a cargo de personal del C.F.E., la proyección multimedia con vistas de Cabra y otros lugares según el fragmento que se interpretaba fue de Eduardo Guijarro, la voz en off sobre aspectos de la ciudad la puso Antonio Suárez Cabello, el maestro interno, Antonio Moral Jurado, que realizó su importante función detrás del escenario y la iluminación de la escena a cargo de los técnicos del Teatro.
La parte musical estuvo a cargo del Coro, con 50 cantantes en sus cuatro cuerdas (sopranos, mezzos o altos, tenores y bajos), el pianista acompañante profesor José Luis Arrabal Maíz, situado en la plataforma del foso de orquesta quien hizo una gran labor en toda su actuación y la violinista Inés Ramírez Polo que colaboró interviniendo en algunas romanzas o arias, bien acompañando a solistas o junto con el piano, lográndose una combinación perfecta. Los solistas fueron de la plantilla de C.F.E. salvo el excelente barítono montillano José Mª Luque, como invitado, que tuvo una actuación magnífica por lo que recibió fuertes aplausos.
La primera parte compuesta de 10 números, comenzó con un fragmento del Preludio de LA CANCIÓN DEL OLVIDO (José Serrano) que fue interpretado por el dúo piano-violín y sirvió de introducción, proyectándose carteles de zarzuelas y explicación por la voz en off.
Después, aparecieron en un primer plano, dos mujeres reales que “remendaban” unas redes y unos pescadores en silueta en la proyección, entrando el Coro que cantó de LOS GAVILANES (Jacinto Guerrero) el conocido y bello Coro de pescadores. Fue dicho con mucho gusto.
De LUISA FERNANDA (F. Moreno Torroba) la romanza de Vidal, por José Mª Luque, que hizo su primera aparición junto con el coro de vareadores, siguiendo después el Dúo de Luisa Fernanda y Javier que lo cantaron la soprano Leonor Serrano, con voz pequeña preciosa, total afinación y gusto, y el tenor José M. Rodríguez, con gran seguridad. Todos recibieron muchísimas palmas y bravos.
El “duetto” cómico de LA DOLOROSA (J. Serrano) hizo reir y mucho al público, pues bordaron su actuación Trini Valverde, soprano, en el papel de Nicasia y Eustasio Moreno, tenor, en el de Perico, aderezado además con “el baile” de ambos.
LA DEL SOTO DEL PARRAL (R.Soutullo y J. Vert) con el Coro de Mozas y Mozos, “¿Dónde estarán nuestros mozos?” fue muy bien cantado sin fisura alguna, como ocurrió en toda la noche con el coro.
En la canción “Deja la guadaña segador” de BLACK, EL PAYASO (P Sorozábal) el tenor José M. Rodríguez demostró su amplitud de voz que llega perfectamente a notas bajas, como a los agudos, sin gran esfuerzo. Magnífico.
LA ROSA DEL AZAFRAN (J Guerrero) Pasacalle de las escaleras, Alberto Pomares, tenor cómico, como Maniquito, con su San Roque, y la Catalina de Rocío Muriel, dejaron su buen hacer y los asistentes disfrutamos de lo lindo. Entre los actuantes de este número señalo la entrada en escena del tenor Vicente Valverde que con la figura impresionante de maestro antiguo elegante, le dio también su toque al número, junto con el coro de varones en la tabla de sumar o multiplicar.
LA TABERNERA DEL PUERTO (P. Sorozábal) con su aria de Marola “En un país de fábula” la cantó la joven soprano Cecilia de los Ángeles Fernández, de voz muy dulce y segura en los agudos. Está empezando su carrera de Canto y espero vaya a más. En el ambiente flotaba la figura de Carmelita Moreno, que tantas veces cantó esta canción con el C.F.E. número que dominaba a la perfección con su timbre de voz claro y diáfano.
EL BARBERILLO DE LAVAPIÉS (F. Asenjo Barbieri) con la “Entrada de Paloma” pero precedida del barberillo Lamparilla que “dio un repaso” a los políticos de la época, representado por Eustasio Moreno, siendo Paloma la soprano Leonor Serrano, quien cantó muy afinada, como antes, con su bonita voz, llevando el realce personal de un bello mantón de Manila blanco. El pianista se lució.
Tras un descanso, en que el público permaneció en sus asientos (hay quien dice que por no haberse abierto aún el bar), la segunda parte que comprendía 8 obras comenzó con la “Ensalada madrileña” ¡Viva Madrid! de DON MANOLITO (P. Sorozábal) que el coro solventó muy bien, pese a su dificultad. Las féminas lucieron preciosos mantones de Manila.
Vino el Dúo de la Habanera de DON GIL DE ALCALÁ (M. Penella) “Todas las mañanitas” que lo cantaron dos sopranos, Teresa Moreno, como Niña Estrella y Trini Valverde. Deliciosas. El coro se sumó en el final.
El Bolero de CECILIA VALDÉS (Gonzalo Roig) fue cantado por el barítono montillano, que apareció con traje negro, como si fuera una versión concierto. Una iluminación azul y de fondo un palacete ponía una bella escena. Se lució y recibió muchísimas palmas y bravos. También el piano tuvo una gran actuación.
KATIUSKA (P. Sorozábal) fue la más interpretada. Cantó la Romanza “Noche hermosa” Cecilia de los Ángeles”, con su voz dulce, como dije, haciendo un dúo precioso con el violín de Inés Ramírez. Siguió luego la “Introducción” por el coro, con vestimenta de rusos, que en su éxodo, cantaban una canción triste de lamento . Y continuando Katiuska el “Concertante” comenzó con la llegada del Príncipe Sergio, José M. Rodríguez, que una vez más cantó con mucho gusto y poder su papel, actuando en cometidos cortos Gloria Benítez, soprano, como Katiuska, y José M. Roldán, bajo, como un ruso revolucionario, siendo acompañados por el coro en el concertante final grandioso.
LA REVOLTOSA (R. Chapí) con un Felipe, José Mª Luque y una Mari Pepa, Teresa Moreno, con atuendos clásicos se lucieron en el conocidísimo Dúo, que terminó sus últimos compases entre palmas, bravos y silbidos (de los buenos).
Y por último apareció Leonor Serrano en el papel de Pilar, para la bella Salve de GIGANTES Y CABEZUDOS (M. Fdez. Caballero), saliendo a continuación el coro en estado de gracia, que remató la faena, con unos tenores que sonaban como debe ser en esta obra. Por supuesto todos de “maños”. La proyección multimedia presentó unas vistas del Santuario de la Virgen de la Sierra. La Patrona de Cabra presidió los últimos compases del Ave María.
Fue una noche memorable para la historia del centenario C. F. E que hacía mucho tiempo que no representaba en escena Zarzuela, aunque si se ha cantado mucho en conciertos. El vistoso vestuario puso el colorido a la representación y las modernas proyecciones multimedia han sustituido a los antiguos decorados.
Al final, como en toda representación, saludaron todos los artistas, recibiendo una calurosa despedida por el público puesto en pie.
Todos salimos muy contentos por esta demostración de gran categoría con que nos había obsequiado el C,F,E.
Como dato anecdótico de la noche, la función fue interrumpida un par de minutos por un apagón eléctrico que fue general en toda la ciudad, creo que por la temperatura desapacible y la lluvia que caía, lo que motivó que actuase un “segundo coro de toses”, que no estuvo tan lucido como el del C.F.E. Dicen que sonaron algunos móviles, pese a ser anunciado por la megafonía que se desconectaran.
La función se repite hoy 14 de diciembre, a las 13 horas, como ha venido anunciándose, para atender las numerosas peticiones de localidades.
Aunque sé de las dificultades que entraña montar un concierto de zarzuela escenificado, ya que hay más material casi montado, el C.F.E. puede ir pensando en otra II Antología de la Zarzuela, introduciendo números en los que actuara su Orquesta de Plectro, como podrían ser las “caleseras” del Barberillo, Los sobrinos del capitán Grant, el Canastillo de fresas, etc.
Por último, se podría hacer un DVD de la representación, al igual que en su día el Ayuntamiento de Baena hizo con la ópera Las bodas de Fígaro, que dirigió también José Antonio Varo con la Coral baenense en su Teatro Liceo.
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