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El Instituto de Cabra y sus actos en el III Centenario de la publicación de El Quijote: los preparativos
05.04.16 - Escrito por: Pablo Luque Valle
La consulta de la Acta del Claustro del 25 de febrero de 1904 del antiguo Instituto General y Técnico de Cabra, posteriormente Colegio de Humanidades de Cabra y hoy IES "Aguilar y Eslava"; nos descubre como este centro educativo, desde ese año tenía su mente puesta en realizar alguna actividad conmemorativa del tercer centenario de la publicación del Quijote.
En el curso académico posterior la primera referencia que tenemos sobre esta propuesta se encuentra en el punto tercero de la sesión de Claustro de 21 de febrero de 1905. En ésta ya se lee textualmente la cual dice así:"... y que en la Sima de Cabra, citada en la obra inmortal, se inscribiese en una lápida formada sobre la peña vertical del lado derecho convenientemente preparada, el párrafo que á la citada Sima se refiere y la fecha de la inscripción con el nombre del Instituto que la hace y á cuyo efecto, se encargó al señor Profesor de Dibujo Don Angel Hernandez, que forme un croquis de la lápida e inscripción y de acuerdo con algun maestro cantero forme el presupuesto de la obra, para someterlo á la aprobación del Claustro, en la próxima seción, por ser ya de urgenciá, dada la proximidad de la fecha del Centenario y que para algun acto literario que haya de celebrarse, vaya la Comisión pensando en él".
La propuesta de conceder un título de Bachiller gratuito apareció posteriormente en una Real Orden del Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes, como veremos posteriormente. Y la idea de la instalación de una lápida conmemorativa en la boca de la Sima, bien pudiera ser un proyecto copiado de las posibilidades que se barajaban en la Junta creada por el Real Decreto de 1 de enero de 1904 (Gaceta de Madrid, nº 2, 2 de enero de 1904) para secundar y ordenar la conmemoración del tercer centenario de la aparición del Quijote. Esta Junta entre los acuerdos del 31 de diciembre de 1904, deciden aprobar la idea de la Real Academia de San Fernando de crear un concurso para la ejecución de dos lápidas conmemorativas para sendos edificios donde se imprimieron la primera y segunda parte del Quijote; a petición del Sr. Marqués de Aguilar de Campóo también se aprueba fijar otra lápida en el "edificio en que en dicha villa se dice que escribió Cervantes el capítulo relativo á la hazaña de los molinos de viento. La Junta juzgó muy oportuna la indicación; pero tratando antes de depurar lo que hubiese de verdad en la referida tradición" (Libro de Actas de la Junta organizadora del III Centenario de la publicación del Quijote, 31 de diciembre de 1904, 21. Fuente: AGA, legajo 65/14394).
Un mes después, el 21 de marzo, el Señor Hernández "presentó el proyecto de lápida para la entrada de la "Sima", ejecutado en dibujos y en relieve de barro y por lo artístico y esmerado del trabajo, mereció los plácemes del Claustro y hecho un abance del costo de la labor, se acuerda autorizar al dicho Señor Hernandez, para que en forma de concurso, encargue su ejecución al Artista que lo ejecute en condiciones más ventajosas" (Acta del Claustro de 21 de marzo de 1905, 100. Fuente: Archivo del Instituto-Fundación-Museo "Aguilar y Eslava"). Decidiéndose que la visita a la Sima de Cabra fuera el día 7 de mayo por la mañana, mientras que la misa y el acto literario tendría lugar al día siguiente; por la mañana y por la noche, respectivamente.
Entre tanto, el Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes, por medio de la Real Orden del 6 de marzo de 1905, en la que la Junta oficial constituida para organizar el tercer centenario de la publicación del Quijote propuso "que las fiestas y solemnidades tenga lugar en los días 7, 8 y 9 del próximo mes de Mayo" (Gaceta de Madrid, nº 66, 7 de marzo de 1905, 888); que cayó en domingo, lunes y martes; tal y como acordó la Comisión organizadora el 2 de febrero de 1905 (Libro de Actas de la Junta organizadora del III Centenario de la publicación del Quijote, 2 de febrero de 1905, 33-34. Fuente: AGA, legajo 65/14394). En su primer punto, recomendaba a todos los centros docentes de España que el día 8 de mayo celebrasen algún acto literario ó artístico para solemnizar dicha efemérides, organizándolo con total independencia y adaptándolo a las condiciones y elementos de cada centro.
Finalmente, en la sesión del Claustro del día 3 de mayo de 1905 se acuerda la organización de los actos de dicha celebración: "... Segundo concurrir el Claustro con una comisión de alumnos del internado y autoridades invitadas á descubrir la lápida conmemorativa situada en la boca de la Sima, en la mañana del 8, saliendo de esta á las 7 de la mañana y verificando el acto oficial á las 9 de la misma...". La crónica de la prensa de la época El Defensor de Córdoba, nº 1683, 13 de mayo de 1905, p. 2 y, posteriormente, la publicación de la Acta de la inauguración de la lápida en La Opinión, nº 1898, 7 de septiembre de 1955, 17-18; nos revelan cómo sucedió aquel histórico evento.
Día 8. Como en la segunda parte del capítulo XIV de la obra del Quijote, se habla de la famosa Sima existente en el término de Cabra, acordó este claustro consagrar en ella un recuerdo imperecedero, colocando una lápida en la boca de la misma Sima, llevándolo á efecto y inaugurándola en este día con grandiosa solemnidad, y concurriendo al acto de descubrirla, el claustro, la junta de Administración y gobierno del Real Colegio, una comisión de escolares, las autoridades Eclesiásticas y civil y número público. El señor Director Dr. D. Manuel Correche y Ojeda, en el momento de descubrir la lápida dirigió la palabra al numeroso y escogido público que presenciaban tan solemne acto en los términos siguientes: "En nombre de S.M. el Rey don Alfonso XIII y del Excmo. Sr. Ministro de Instrucción pública y Bellas Artes, inauguró este monumento que al claustro de Catedrático del Instituto general y técnico de Cabra y Real colegio de la Purísima Concepción, elevándolo para honra de España y glorificación de Cervantes, autor del libro inmortal cuyo tercer centenario en estos solmenes momentos celebramos". Al terminar estas palabras se dieron entusiastas vivas á la patria, al rey don Alfonso XIII, al pueblo de Cabra, al claustro de Catedrático de este Instituto y Real colegio de la Purísima Concepción de esta ciudad, que fueron calurosamente contestados por el escogido público que atentamente les escuchaba. Corrióse la cortina que cubría la lápida y quedó terminado el acto.
La lápida proyectada y dirigida su construcción por el ilustrado Profesor de Dibujo don Angel Hernández Mohedano; está situada en la roca natural que sirve de marco á la profundidad de la Sima, en su parte de la derecha y se halla formada por una cornisa sostenida por dos pilastras formando un rectángulo de 10 centímetros de alto, por 110 de ancho, tallado en alto relieve y dentro de él, con igual talla, una orla circular en que se lee "Instituto general y técnico y Real colegio de Cabra" las fechas 1605 y 1905 en los ángulos superiores; y "en el tercer centenario de la publicación del Quijote" en los inferiores; en el centro figura un libro abierto, en cuya primera línea se lee "Don Quijote de la Mancha", y el texto de sus dos páginas, las palabras "Otra vez me mandó que me precipitase y sumiese en la Sima de Cabra"¡peligro inaudito y temeroso! Y que le trujese particular relación de lo que en aquella oscura profundidad se encierra (Parte segunda Capítulo XIV).
Del descubrimiento de la lápida conmemorativa en la boca de la Sima, quedó el testimonio gráfico que apareció publicado, por primera vez, en el tomo X de la Enciclopedia Universal Ilustrada Europeo-Americana de Espasa-Calpe (1911, 193), según afirman Moreno (1995) y Vera et al. (1995), y hemos podido confirmar con Manuel Durán Blázquez, editorial Espasa Libros, SLU. Instantánea reproducida en el volumen titulado Andalucía en Blanco y Negro de Pereiras y Holgado (1999); que tan acertadamente el historiador egabrense José Luís Casas Sánchez supo datar y referenciar (El Paseo, nº XII, octubre de 2003, 86-87). Esta fotografía, según Luque (2015), surge de las instrucciones que se dictan desde el Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes, ya que los centros docentes debían enviar al gobernador civil de su provincia "datos y fotografías" (Gaceta de Madrid, nº 66, 7 de marzo de 1905, 888) de cuantos festejos habían celebrado; con el objeto de que el Ministerio preparase una memoria con todos los actos dedicados a conmemorar este importante suceso literario. Los secretos de esta estampa han sido revelados por Luque (2015) en su libro a cerca de La Sima de Cabra. Pero, en referencia a la lápida, podemos indicar que se observa una cortina o bandera que cubre la lápida, lo que indica que la fotografía se realizó previa al descubrimiento de la misma.
De igual modo, del acto de descubrimiento de la lápida conmemorativa se elevó acta que fue reproducida cincuenta años después en la prensa local, La Opinión; desconociendo el origen y la fecha de la misma. Este acta no la hemos encontrado en los archivos del IES "Aguilar y Eslava"; como hemos dicho antes, no sabemos la fecha de la misma, pero por el texto debió ser el mismo día del acto o poco después. Este documento nos revela aspectos muy interesantes que testimonian la magnitud de aquel evento, la transcribo literalmente:
El monumento proyectado y dirigido por el ilustrado profesor numerario de Dibujo, D. Angel Hernández Mohedano, se halla formado por una lápida rectangular de un metro setenta centímetros de alta, por uno diez de ancha, tallado en la roca vertical que se abre a la derecha de la boca de la Sima, en alto relieve, formando una cornisa sostenida por dos pilastras y en su interior una orla circular con la inscripción «Instituto general y técnico y Real Colegio de Cabra», en los ángulos superiores las fechas «1605 - 1905», en los inferiores «En el Tercer Centenario de la publicación del Quijote», en el centro de esta orla, otro alto relieve que figura un libro abierto, leyéndose en su primera línea «Don Quijote de la Mancha» y debajo como texto de sus dos páginas las palabras: «Otra vez me mandó que me precipitase y sumiese en la sima de Cabra ¡peligro inaudito y temeroso! y que le trujese particular relación de lo que en aquella escura profundidad se encierra», (parte segunda, capítulo XIV). (La Opinión, nº 1898, 7 de septiembre de 1955, 17-18).
La obra se realizó en los talleres de Vicente Flores y tallada a mano por Tomás Esteban Molina, trabajador del anterior (Luque, 2015).
Finalizados los actos anteriormente descritos, el claustro agradeció a los docentes implicados su dedicación, tal y como podemos leer en el acta correspondiente al 16 de mayo:
1º= Se propuso y fué aprobado por unanimidad un voto de gracias del Claustro, para los señores Lama y Leña Catedrático numerario de Latín y castellano, Hernandez Mohedano, Profesor numerario de Dibujo y Don Pedro Vilchez Ascanio Capellan, por los trabajos tan brillantemente realizados por los expresados señores, con motivo del Centenario de la publicación del Quijote, en el que tan alto han puesto el celo de esta Corporación, con el magnifico discurso leído por el primero en la noche del 7 del corriente, sobre la biografía de Cervantes y bibliografía de su obra inmortal "El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha", por el proyecto y dirección del segundo de la construcción de la lápida conmemorativa colocada en la boca de la Sima y pronunciando el tercero la oración funebre en las honras celebradas por el alma del inmortal Miguel Cervantes Saavedra el 9 del corriente. (Acta de Claustro de 16 de mayo de 1905, 105. Fuente: Archivo del Instituto-Fundación-Museo "Aguilar y Eslava").
El aspecto económico necesario para sufragar estos festejos, fue una preocupación del Instituto. No fue un tema fácil y tuvieron que realizar diversas gestiones para sufragar los gastos; así pues, solicitaron dinero al Real Colegio de la Purísima, como revela Luque (2015), subvencionado con trescientas pesetas, a cambio la Junta de Administración y Gobierno del Colegio solicita que esta institución aparezca en la lápida colocada en la Sima de Cabra.
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